
ESPECTÁCULOS
Julián Gallegos visita su terruño
Una divertida visión de la vida
El artista tabasqueño promociona una recopilación de sus mejores chistes y grabó su nuevo disco de corte ranchero, que en breve saldrá a la luz.
David Cortez Talamante
Si el arte radica en la expresión emocional del ser humano, y el humor o comicidad exalta el estado de ánimo, en el contagio de la risa que avasalla la pesadumbre —aunque de manera fugaz— el comediante se convierte en un artífice del estímulo a la vida, siempre en su propia visión del mundo.
Y el tabasqueño Julián Gallegos, un artista que “dice” y “hace” cosas graciosas, que presume de su humor verbal y mediante singulares caracterizaciones e imitaciones de grandes cantantes divierte con su forma de ver la vida, afirma que con su alegría y pasión por lo que hace difícilmente se hubiera dedicado a otro oficio ajeno al de actor y comediante.
Luego de 12 años de voluntario “destierro” en la Unión Americana, donde fue prácticamente secuestrado por el intenso trabajo en los programas de televisión de Los Ángeles, California, ‘Studio 2’ y ‘Kebuena TV’, en cuyos foros se lució con sus personajes como “El Chilargo”, el indio “Maclovio Salinas”, el gay “Petronilo”, la india “Rumialda Clinton”, y el árabe “Bojalol Wilson”, entre otros, el de la ranchería Aztlán, municipio de Centro —ahí nació un 20 de noviembre de 1963—, regresa a su terruño como parte de una gira por el Sureste en la que promociona una recopilación de sus mejores chistes —en tres CD’s y diversos tonos— y un disco de temas rancheros, ya que el tabasqueño domina varios géneros, lo mismo canta música ranchera y cumbia que balada o grupera.
Sin sentirse profeta en su tierra, donde su trabajo ya es bien valorado por sus orgullosos coterráneos, recientemente Julián Gallegos terminó una corta cuan abarrotada temporada en “La Troje” del hotel Calinda Viva, donde ofreció un buen espectáculo de dos horas y media de duración, lapso en que la esotérica indita “Rumialda Clinton” cuenta jocosamente su travesía —tergiversada en la de su autor— rumbo a Estados Unidos, y hace las delicias del público, con quien interactú
a y al final le realiza una “limpia” con un sapo.
En el show, “Maclovio Salinas” también hace de las suyas. Este típico personaje mexicano es el favorito de la televisión y radio hispana en Estados Unidos, donde le celebran su ingeniosa forma de transmitir las noticias, de contar chistes y de entrevistar artistas de gran renombre. Sin embargo, el personaje que siempre arranca la hilaridad de la gente —y favorito de su creador— es “Petronilo”, un ocurrente gay, maestro en el “aflojamiento del cuerpo”, que siempre mantiene en la carcajada al sexo femenino y en la complacida expectativa a los varones que quiere “convertir” a su bando.
De los pocos seres que hacen lo que les gusta, y además vive de ello desde hace poco más de 28 años, Julián Gallegos se declara afortunado por disfrutar de su trabajo, que consta también de una docena de películas, entre las que destacan “La Gata Cristy” y “Bella entre Las Flores” —de ellas cuatro de acción: “Muerte en Tlalpan”, “Barrio de Cholos”, Comisario Ejidal” y “Regreso de la Lobo del Año” — y 10 discos musicales en diversos géneros. Por supuesto, Julián se divierte junto a su público imitando a cantantes famosos como Paquita la del Barrio, Amanda Miguel, Juan Gabriel, Antonio Aguilar, Flor Silvestre y Yolanda del Río.
En espera de grabar un programa televisivo en Los Ángeles, California, que se transmitirá en toda la Unión Americana, el entusiasmado comediante tabasqueño alterna su carrera allende la frontera con presentaciones en el sureste de la República, sin omitir a su querido Tabasco, donde tiene sus raíces, que por cierto emergieron con fuerza a raíz de la inundación sufrida en el solar, cuando realizó un “radiotón” en los Estados Unidos, y colectó varios miles de dólares y dos trailers cargados de víveres para sus paisanos en apuros, quienes a pesar de todos, afirma, “no han perdido la esperanza y la alegría de vivir que nos caracteriza”.
Julián Gallegos visita su terruño
Una divertida visión de la vida
El artista tabasqueño promociona una recopilación de sus mejores chistes y grabó su nuevo disco de corte ranchero, que en breve saldrá a la luz.
David Cortez Talamante
Si el arte radica en la expresión emocional del ser humano, y el humor o comicidad exalta el estado de ánimo, en el contagio de la risa que avasalla la pesadumbre —aunque de manera fugaz— el comediante se convierte en un artífice del estímulo a la vida, siempre en su propia visión del mundo.
Y el tabasqueño Julián Gallegos, un artista que “dice” y “hace” cosas graciosas, que presume de su humor verbal y mediante singulares caracterizaciones e imitaciones de grandes cantantes divierte con su forma de ver la vida, afirma que con su alegría y pasión por lo que hace difícilmente se hubiera dedicado a otro oficio ajeno al de actor y comediante.
Luego de 12 años de voluntario “destierro” en la Unión Americana, donde fue prácticamente secuestrado por el intenso trabajo en los programas de televisión de Los Ángeles, California, ‘Studio 2’ y ‘Kebuena TV’, en cuyos foros se lució con sus personajes como “El Chilargo”, el indio “Maclovio Salinas”, el gay “Petronilo”, la india “Rumialda Clinton”, y el árabe “Bojalol Wilson”, entre otros, el de la ranchería Aztlán, municipio de Centro —ahí nació un 20 de noviembre de 1963—, regresa a su terruño como parte de una gira por el Sureste en la que promociona una recopilación de sus mejores chistes —en tres CD’s y diversos tonos— y un disco de temas rancheros, ya que el tabasqueño domina varios géneros, lo mismo canta música ranchera y cumbia que balada o grupera.
Sin sentirse profeta en su tierra, donde su trabajo ya es bien valorado por sus orgullosos coterráneos, recientemente Julián Gallegos terminó una corta cuan abarrotada temporada en “La Troje” del hotel Calinda Viva, donde ofreció un buen espectáculo de dos horas y media de duración, lapso en que la esotérica indita “Rumialda Clinton” cuenta jocosamente su travesía —tergiversada en la de su autor— rumbo a Estados Unidos, y hace las delicias del público, con quien interactú

En el show, “Maclovio Salinas” también hace de las suyas. Este típico personaje mexicano es el favorito de la televisión y radio hispana en Estados Unidos, donde le celebran su ingeniosa forma de transmitir las noticias, de contar chistes y de entrevistar artistas de gran renombre. Sin embargo, el personaje que siempre arranca la hilaridad de la gente —y favorito de su creador— es “Petronilo”, un ocurrente gay, maestro en el “aflojamiento del cuerpo”, que siempre mantiene en la carcajada al sexo femenino y en la complacida expectativa a los varones que quiere “convertir” a su bando.
De los pocos seres que hacen lo que les gusta, y además vive de ello desde hace poco más de 28 años, Julián Gallegos se declara afortunado por disfrutar de su trabajo, que consta también de una docena de películas, entre las que destacan “La Gata Cristy” y “Bella entre Las Flores” —de ellas cuatro de acción: “Muerte en Tlalpan”, “Barrio de Cholos”, Comisario Ejidal” y “Regreso de la Lobo del Año” — y 10 discos musicales en diversos géneros. Por supuesto, Julián se divierte junto a su público imitando a cantantes famosos como Paquita la del Barrio, Amanda Miguel, Juan Gabriel, Antonio Aguilar, Flor Silvestre y Yolanda del Río.
En espera de grabar un programa televisivo en Los Ángeles, California, que se transmitirá en toda la Unión Americana, el entusiasmado comediante tabasqueño alterna su carrera allende la frontera con presentaciones en el sureste de la República, sin omitir a su querido Tabasco, donde tiene sus raíces, que por cierto emergieron con fuerza a raíz de la inundación sufrida en el solar, cuando realizó un “radiotón” en los Estados Unidos, y colectó varios miles de dólares y dos trailers cargados de víveres para sus paisanos en apuros, quienes a pesar de todos, afirma, “no han perdido la esperanza y la alegría de vivir que nos caracteriza”.