Poesía: amor y muerte

En homenaje a Jaime Sabines se recuerdan unas de sus frases, decía: La muerte ha sido una presencia constante en mi poesía. Ya lo digo en un poema: “¿Quién me untó la muerte en la planta de los pies el día de mi nacimiento?”.
“Es que mi vida ha estado marcada por la muerte. Pero desde la muerte de mi hijo Jaime a los veintidós años no he querido hablar más. Dejémosla allí, no hablemos de ella, que se olvide de mí por mucho tiempo”.

Déjame reposar,
aflojar los músculos del corazón
y poner a dormitar el alma
para poder hablar,
para poder recordar estos días,
los más largos del tiempo.

Convalecemos de la angustia apenas
y estamos débiles, asustadizos,
despertando dos o tres veces de nuestro escaso sueño
para verte en la noche y saber que respiras.
Necesitamos despertar para estar más despiertos
en esta pesadilla llena de gentes y de ruidos.

De Yésica Gómez Olivé, de Comalcalco,
se publican tres de sus trabajos:
Sin tu amor

Sin tu amor
mi vida es la vena
del dolor,
mi cielo es gris,
mi día no tiene color
pues yo no vivo sin tu amor.
Me invade el dolor,

No puedo vivir sin ti.
regresa a mi vida
sáname esta herida
que me mata el corazón.

Sólo a tu lado mi vida
tiene sentido y mis días color.
regresa a mi vida
porque la vida
se me va sin tu amor.


Amor

El amor es el sentimiento
más hermoso,
cuando amas tus días son
primorosos y llenos de color.

El cielo es más azul
el sol brilla más,
si tu amas, lo sabrás:
amar es tocar a Dios.
Entender el lenguaje
del amor,
es sentir hablar
con Dios.


Vuelve amor

Vuelve amor,
desde el día que te fuiste
yo estoy triste
y llena de dolor.

Ya no siento el corazón
que se me ha helado
por tu adiós.

Quiero decirte que te amo,
quiero estar a tu lado,
no puedo decirte adiós.

Me duele este frío,
regresa cariño mío
llévate este dolor;
regresa y salva este
inmenso amor.